El Día Internacional de las Personas con Discapacidad se conmemora cada 3 de diciembre según lo establecido, en 1992, por la Asamblea General de las Naciones Unidas mediante la resolución 47/3. El objetivo principal es promover los derechos y el bienestar de las personas con discapacidad en todos los ámbitos de la sociedad y el desarrollo, así como propiciar la concientización sobre su situación en todos los aspectos de la vida política, social, económica y cultural. La persona con discapacidad forma parte de la sociedad y como tal, debe ser partícipe como sujeto de derecho.
Por otra parte, en este siglo, uno de los hitos más relevantes es la Declaración internacional sobre los derechos de las personas con discapacidad proclamada por la ONU, en el año 2006, que amplía y fortalece lo establecido por diversas declaraciones, pactos y programas. El propósito de la Convención es “promover, proteger y asegurar el goce pleno y en condiciones de igualdad de todos los derechos humanos y libertades fundamentales por todas las personas con discapacidad, y promover el respeto de su dignidad inherente”.
Una sociedad que habla de diversidad, de inclusión en relación a las personas con discapacidades significa que emprende un camino para mejorar la vida de todos, sin dejar a nadie atrás. Se busca promover conciencia, diálogo y reflexión sobre las acciones necesarias para garantizar la plena inclusión de las personas con discapacidad. Hay que construir un mundo más accesible, un camino hacia el bienestar ya que todas las personas son acreedoras del mismo valor como seres humanos.
Texto: Verónica Martínez, profesora de la Facultad de Educación y coordinadora del Área de Inclusión de Personas con Discapacidad.