La Universidad Nacional de Cuyo se movilizó como forma de visibilización y defensa de la Educación, la Investigación y la Extensión de la Universidad Pública. Una columna de diez cuadras de integrantes de la comunidad universitaria participó del Banderazo que inició en el campus de la Casa de Estudios y culminó en la sede Centro de la Facultad de Educación, en calle Sobremonte 81 de Ciudad.
La decana Ana Sisti, que junto a su Consejo Directivo, promovió la actividad, se refirió al rol relevante que tiene la universidad en la sociedad. "La universidad pública, la Universidad Nacional de Cuyo, es parte de ese concierto de universidades nacionales que, con acciones, muchas veces invisibles, llegan a lugares vulnerados y transforman. La universidad se involucra con la comunidad. No es solo un aula en un edificio, es territorio y es investigación, es ciencia y es extensión, es innovación y es capacitación. Es un elemento imprescindible para el desarrollo y evolución del país, pero también es un espacio que produce experiencias de las más variadas, enriquecedoras y de crecimiento personal, las ligadas a lo social, a lo vincular, al desarrollo de la personalidad de los que la vivencian, al crecimiento de la cultura, a la vida política, al fortalecimiento de la democracia", señaló.
En este sentido, Sisti, afirmó que "la educación universitaria no es un servicio, no es un bien transable y jamás un privilegio a conseguir", por lo que remarcó la importancia de defenderla con acciones concretas, mostrando todo aquello que es posible alcanzar a partir de ella.
Por su parte, Gustavo Zonana, decano de Filosofía y Letras, se centró en la defensa de principios que son universales y la educación superior como derecho. "Estamos defendiendo una historia que remite a la reforma del 18 y que tiene como principio que la educación universitaria es formación en docencia, es investigación y es extensión. Esos son los ejes que queremos sostener", sostuvo.
En esta misma línea, la decana de Ciencias Políticas y Sociales, Eugenia Martin, expresó la necesidad de acompañamiento por parte de toda la comunidad mendocina para que se sume a la defensa de la UNCuyo. "El ataque, la estigmatización y el instalar la sospecha permanente sobre instituciones tan importantes para la vida de nuestras ciudades y comunidades no nos conduce a un buen puerto para mejorar todo lo que sea necesario mejorar, que siempre la Universidad Nacional de Cuyo está dispuesta a hacerlo", enfatizó.
Augusto Roggiero, decano de la Facultad de Ciencias Aplicadas a la Industria envió unas palabras, dado que se encontraba en su Unidad Académica ubicada en la ciudad de San Rafael. En ellas expresó que el sistema universitario público argentino sigue siendo el motor que impulsa la transformación de cada estudiante y de toda la sociedad. “Somos parte de la solución, no somos un gasto, somos la mejor inversión que Argentina puede realizar en vista a su crecimiento y desarrollo”.
Los estudiantes presentes también expresaron su preocupación por la situación actual. "Defendemos la educación, la extensión, la innovación, la vinculación y la investigación a lo largo y ancho del país, en todo el sistema de universidades nacionales, pero la educación no se financia entregando los recursos naturales. Es un legado que tenemos que defender y el estado tiene la responsabilidad de garantizar e impulsar", señalaron desde el centro de estudiantes de la Facultad de Ciencias Agrarias.
Desde el centro de Ciencias Exactas y Naturales también hicieron hincapié en defender la ciencia y tecnología nacional, soberana y de calidad, sin la que "no existiría el nivel desarrollo que tienen las empresas y organismos en la actualidad". Desde Educación celebraron la convocatoria y lucha colectiva, "porque no es solamente una lucha de docentes y de autoridades, sino que nos tenemos que apoyar entre todos; somos una comunidad y las cosas se logran participando todos".
En el cierre de la manifestación, la rectora expresó: "Sin educación no es posible salir de la pobreza que tenemos hoy. La única manera de lograr superarla no sólo para los sectores que pueden acceder a la educación sino para todos los sectores, sobre todo los más vulnerables es a través de la educación pública, sin arancelamiento. La educación pública como un derecho humano, como un bien social y la educación pública como una obligación que debe ser financiada por el Estado".
"En esta lucha estamos -continuó- y esta es la lucha que libramos en el Consejo Interuniversitario Nacional todas las rectoras y rectores en presencia de las autoridades de educación nacional. Allí es donde llevamos nuestras demandas y hablamos de la importancia de lograr un diálogo para que nuestros docentes y no docentes sean escuchados en paritarias. Para que realmente sean tenidas en cuenta sus demandas, pero sobre todo para que nos financien y que el acto académico sea posible con todas las condiciones necesarias".
Además, el vicerrector Gabriel Fidel (ausente por estar en Buenos Aires con tareas de su gestión) sumó su adhesión: "Desde siempre, nuestro compromiso con la universidad pública nos convoca a estar unidos y defender la educación pública como derecho humano, como bien público y obligación del Estado. La educación ha sido fundante en nuestra nación y es esencial para garantizar la transformación de la misma. Es por esto que se hace necesario este legítimo reclamo que busca poner en conocimiento, sensibilizar y movilizar a nuestra sociedad ante la compleja situación que atraviesan las instituciones de educación superior".